El juez Garzón ha decidido declararse competente para juzgar la desaparición de esos 115.000 ciudadanos españoles cuyo único delito era ser republicanos y defender la democracia contra un golpe de Estado.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional se opone, entre otras razones porque, en todo caso, podría acusarse a Franco y sus ministros de "rebelión" pero no de "golpe de Estado". Distinción semántica sin duda, pero que a todos los efectos ocasionó decenas y decenas de muertos y desaparecidos y un cambio brusco, por la forma, de la estructura de Gobierno que se habían dotado, democráticamente, los españoles. Afirma que la Ley de Amnistía de 1977 ha resuelto este tema. No soy jurista, pero ¿cómo se puede amnistiar a alguien que ha cometido un gravísimo delito y los cuerpos no aparecen?
La extensión a los altos miembros y dirigentes de la Falange entre 1936 y 1951 hace concebir la esperanza de que alguno que todavía viva, sentirá el aliento de la justicia muy cerca.
Los que claman porque "se dejen quietas las heridas del pasado" [...] "hay que mirar al futuro", pretenden que la Historia (con mayúsuclas) no se reescriba de acuerdo a la voluntad mayoritaria del pueblo español.
El Gobierno debe estar a las alturas de las circunstancias y prestar un apoyo entusiasta a la investigación.
Quisiera manifestar en estas líneas que existen otros responsables (o quizás más) que son los que apoyaron económicamente el golpe militar, ¿quién puso el dinero para comprar armas, fletar barcos y alimentos para las fuerzas golpistas?
En Alemania se ha juzgado a los bancos, empresas y empresarios que apoyaron a Hitler, ¿aquí no?
JRM
PD: el que tenga tiempo que mire este video (gracias Mónica por el chivatazo), muy esclarecedor en estos tiempos de crisis económica (pinchar aquí); es un poco largo.
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